Mayo, McGregor y la visión organizacional humanista

Mayo, McGregor y la visión organizacional humanista

Mayo, McGregor y la visión organizacional humanista

La denomino así, la visión humanista, porque si por algo se caracteriza es por introducir al ser humano en la ecuación organizativa-empresarial.

El hombre ya no queda reducido a mero engranaje, papel predominante que tenía en la visión clásica.


La visión organizacional humanista de Elton Mayo

Dando sus primeros pasos tras la Primera Guerra Mundial que asoló Europa, y partiendo del trauma consecuente, destacamos como dos de sus máximos representantes a Elton Mayo y a Douglas McGregor, si bien hay que destacar la distancia cronológica entre ambos; Mayo comienza a hacer sus aportaciones en los años 20 mientras que las Teorías X e Y de McGregor fueron publicadas hacia finales de los 50.

La gran revolución comienza con Mayo y con su Escuela de las Relaciones Humanas; existe motivación más allá del salario y es posible que el trabajador sea más eficiente si es movido por factores ajenos al control del tiempo y la medición de las tareas.


La planta Hawthorne de la Western Electric

Todo surgió cuando Mayo fue llamado por la planta Hawthorne de la Western Electric para ver si les podía echar una mano para entender qué estaba realmente pasando en la base de la empresa.

Western Electric era bastante adelantada en el trato que daba a sus empleados y disponía de una buena cobertura social, así como de entretenimientos varios.

No obstante, había un descontento generalizado y nadie, al parecer, se podía explicar a qué se debía, y menos partiendo de las tesis industriales de control de la iluminación y fatiga y otros elementos considerados clave para que el trabajador rindiera como debía, y que ya habían sido amplia y profusamente aplicados en la planta Hawthorne.

Tras una tediosa investigación Mayo encontró que había otros factores además de los higiénicos[1] que estaban directamente relacionados con el rendimiento.

«La satisfacción o insatisfacción del trabajador se derivaba esencialmente de su apreciación personal respecto a su posición social dentro de la empresa y de lo que creía merecer en cuanto al salario», de forma que «al tratar al trabajador como un mero par de manos alquiladas y cuyos otros sentimientos, si acaso los tenía, podían ignorarse impunemente, los directivos despojaban al obrero de su dignidad y lo privaban de cualquier razón para querer cooperar más de lo que estaba obligado»[2].

En otras palabras, «quedó completamente de manifiesto, para los investigadores, que la moral del grupo y las motivaciones personales fueron unos factores de tal importancia, que llegaron a enmascarar por completo los efectos de la iluminación, ventilación y fatiga, que eran las variables estudiadas».[3]

Es decir, la empresa debe cuidar las relaciones entre los individuos y, por tanto, la organización no formal presente en la misma, tratando de que el individuo pueda satisfacer sus necesidades socio-emocionales también dentro del propio ámbito laboral.


La visión organizacional humanista de Douglas McGregor

McGregor va más allá y establece dos visiones del hombre, y del trabajador, ligadas al tipo de gerencia que la empresa desarrolle.

De este modo, encontramos la Teoría X, afín a la concepción clásica de la Psicología Industrial, que entiende al hombre como un ente que:

  • Sólo puede ser motivado por el dinero.
  • Ha de ser controlado y gestionado por la organización.
  • Debe ser privado, en la medida de lo posible, de sus emociones, pues éstas interfieren negativamente en el trabajo.
  • Cuyos intereses son antagónicos a los de la empresa.
  • Incapaz de controlarse a sí mismo y que sólo se mueve por incentivos extrínsecos.

Dentro de la Teoría X tendríamos a cualquier empresa que al hablar de RRHH emplee indistintamente el término de “Personal”.

La Teoría Y es antagónica, tanto en su base como en el concepto del hombre que transmite a la dirección y que, consecuentemente, alteraría la forma en que ésta gestionaría a sus empleados.

Según la misma, el hombre:

  • Puede tener auto-motivación.
  • Puede encontrar satisfactorio el trabajo en sí.
  • Busca la autorrealización.
  • Persigue responsabilidades y reconocimiento.
  • Quiere autonomía.

La Teoría Y es la teoría de la dirección por objetivos, del trabajador como ente responsable que no quiere ser tratado como una máquina.

El ser humano, gracias a la visión organizacional humanista de Mayo y McGregor, aparece en la organización empresarial e industrial.


Como siempre, a tu servicio.

Esperamos que el post te haya sido de utilidad.

¡Un saludo!

Pablo Jiménez Cores, Psicólogo Social, Socio y Director de Estrategia de Negocio de asv360


Referencias

[1] Entendiendo tales como los ambientales; tipo de luz, ventilación adecuada, descansos suficientes, limpieza del área de trabajo, etc.

[2] Guevara, R., La gestión de las relaciones y la responsabilidad social empresarial, En <http://www.eumed.net/libros/2008c/438/Los%20Experimentos%20de%20Hawthorne.htm>

[3] Halloran, Jack, (1982). Relaciones humanas, Barcelona, Hispano Europea S.A., pág. 21.